La frutilla del diablo posee frutos llamativos, pero no son comestibles.
La frutilla del diablo es una planta rastrera y perenne que se la reconoce en el campo por la forma arriñonada de sus hojas. Sus frutos son pequeñas drupas rojas, dispuestas en forma de espiga, muy llamativas pero como su nombre lo indica no son palatables, aunque tampoco venenosas.