Una de las dos planta vasculares que se desarrollan en la Antártida, se encuentran principalmente en la Península Antártica, que es la zona menos fría.
El pasto antártico es una hierba perenne que crece entre las rocas. Presenta una estrategia reproductiva que evita la mortalidad de las semillas. Para esto se autopoliniza, nunca abre sus flores, sino que las mantiene cerradas y el polen fecunda el ovario de su misma flor. Además, sintetiza unas proteínas especializadas para evitar que se congele el agua de su interior, pues los cristales de hielo podrían dañar sus células.