El visón americano es un mamífero carnívoro originario de Estados Unidos y Canadá, similar a un hurón cuyo largo varía entre 50 y 70 cm. Es de hábitos semi-acuáticos, nocturnos y solitarios, los machos son territoriales. Es oportunista y satisface sus necesidades alimenticias con la caza de animales que encuentra en su ambiente (ratones, aves, peces, crustáceos e insectos). Cerca de poblados puede atacar aves de corral e incluso existen referencias sobre el ataque a corderos recién nacidos.

Habita en zonas boscosas y arbustivas sobre la rivera de los ríos o lagos y en la costa marina. Utilizan huecos naturales, secos y protegidos para ubicar sus madrigueras. En la actualidad se distribuye desde el sur de Neuquén hasta el centro de Santa Cruz y en varias islas del archipiélago fueguino, y se encuentra en expansión geográfica permanente.

Debido a su preciado pelaje se instalaron criaderos en 33 países fuera de su rango de distribución. En Tierra del Fuego fue introducido en 1948, pero el negocio perdió rentabilidad, entonces se decidió liberar a los individuos. Dado que son animales capaces de vivir en distintos ambientes, alimentarse de diferentes presas y poseer una alta tasa reproductiva, se han adaptado exitosamente al archipiélago fueguino. Sin embargo, esta especie introducida está generando importantes problemas ecológicos y económicos, ya que tiene efectos negativos sobre algunas especies autóctonas, en forma directa a través de la depredación, o indirecta, compitiendo con ellas por el alimento. También puede llegar a causar perjuicios en ciertos tipos de producción (pecuaria, avícola, piscícola). La predación sobre aves, por ejemplo, podría a futuro representar una amenaza a los recursos turísticos de la Provincia.